Títulos Modernizados
Esta lista de títulos es similar a los índices de las muy citadas obras de referencia de Urzáiz Tortajada y Herrera Navarro. Para facilitar la búsqueda de títulos impresos antes de la estandarización de la ortografía española, es necesario ofrecer a los investigadores la ortografía moderna. Esto es especialmente cierto con respecto a las palabras iniciales en un título: Bandos (no Vandos), Celos (no Zelos), Cuando (no Quando), Hay (no Ay) y Fénix (no Phenix).
La ortografía española se estandarizó y adoptó la forma moderna que conocemos a mediados del siglo 19. Aunque la ortografía del siglo 18 es fácilmente inteligible, es mejor que los investigadores encuentren un texto en el primer intento, sin tener que adivinar las diversas maneras en que una palabra puede haber sido impresa. No debiera ser necesario buscar Ay por Hay, Phenix por Fénix, Quando por Cuando, Vanda por Banda o Zelos por Celos. En el caso de las obras teatrales bajo consideración, los catalogadores y compiladores de catálogos impresos deben establecer una ortografía uniforme y constante, similar a la manera en que un fichero de autoridades reúne bajo un punto de acceso autorizado la varias formas en que aparecen los nombres de autores e impresores en sus obras. La opción más evidente fue modernizar la ortografía siguiendo las normas actuales de acentuación, puntuación y uso de mayúsculas.
Algunos registros bibliográficos incluyen el campo Uniform Title. Con respecto a los títulos en esta base de datos, se trata de un encabezado poco apropiado. Un verdadero título uniforme (por ejemplo, Don Quijote o La Celestina) emerge de la tradición y el uso orgánico del título a través del tiempo. El uso erosiona algunas palabras de más o el título se enfoca en lo esencial: El ingenioso hidalgo Don Quijote de La Mancha se trunca en El Quijote, y el personaje de Celestina opaca a los protagonistas de la Tragi-comedia de Calisto y Melibea, que por ende viene a ser mejor conocida como La Celestina.
Muy pocas de las obras en esta base de datos se conocen mejor por la segunda parte de su título: por ejemplo, Dar la vida por su dama y Conde de Sex se conoce como Conde de Sex, y El ejemplo mayor de la desdicha y Capitán Belisario es mejor conocida como Capitán Belisario. La mayoría de los títulos no son lo suficientemente antiguos o suficientemente mencionados en la literatura especializada como para adquirir esta distinción.